Dicen que, en la vida quien pierde el techo, gana las estrellas. Y es así. A veces pierdes lo que no querías, pero conquistas lo que nunca imaginastes. No todo depende del tiempo, sino de la actitud. El tiempo es como un río, nunca podrás tocar dos veces, porque el agua ya pasó y nunca pasara de nuevo. Aprovecha cada minuto de tu vida y recuerda: Nunca te fijes en la apariencia, porque está cambia con el tiempo. No busques a la persona perfecta, estas no existen. Más busca por encima de todo, a alguien que sepa tu verdadero valor. Ten 4 amores: Dios, la vida, la familia y los amigos. Dios porque es el dueño de la vida, la vida porque es corta, la familia, porque es única y los amigos, porque son tesoros invaluables escogidos por uno mismo.